La Historia de la Galería de los Uffizi
Pocos saben que el monumental complejo de los Uffizi no fue creado para ser un museo. Es propio su nombre lo que explica su destino original: fue de hecho ordenado en 1560 por Cosimo I de’ Medici, primer Gran Duque de Toscana, para dar la bienvenida a las oficinas administrativas y judiciarias de Florencia, los “Oficios” (“Uffizi” en italiano). A la fecha del inicio de la construcción, la Hegemonía de los Medici estaba ya consolidada.
Cosimo invitó a su artista favorito, Giorgio Vasari, a diseñar el edificio en forma de U que podemos admirar hoy en día. El gran arquitecto que también construyó el Corredor secreto, que une y atraviesa la Galería Uffizi hasta el Palacio Pitti, pasando sobre el Puente Vecchio y atravesando la iglesia de Santa Felicidad y numerosos edificios adyacentes antes de salir a los Jardines de Boboli. El “Corredor Vasariano” fué construido en 1506 con motivo de la boda del hijo de Cosimo, Francisco con Giovanna de Austria.
Para construir la Galería de los Uffizi y crear el espacio para el imponente edificio, fueron demolidas muchas construcciones entre ellas la iglesia de San Pier Scheraggio, una antigua e importante iglesia Romanesca, de la que todavía se pueden ver los arcos y columnas de los pasillos, visibles a simple vista desde la vía della Ninna frente al Palacio Vecchio.
La antigua nave de San Pier Scheraggio es la única parte de la iglesia que se mantiene casi intacta y que se encuentra encapsulada en la planta baja de los Uffizi, cerca del Palacio Vecchio y de la entrada del museo.
La Sala de San Pier Scheraggio, a menudo se encuentra cerrada y abre solo para celebraciones y eventos especiales. En su interior encontramos los famosos frescos de Andrea del Castagno que representan el ciclo de los Hombres y Mujeres Ilustres, y otro famoso fresco de Sandro Botticelli con la Anunciación.
La Galería Uffizi fue terminada después de la muerte de Vasari 1574.
En 1581 Francesco I de Medici, el hijo de Cosimo I y el nuevo Gran Duque de la Toscana, adecuó el último piso del ala este de la Galería con estatuas y otros preciados objetos.
Pero el corazón del museo originalmente era la sala octagonal de la Tribuna, completada por Bernardo Buontalenti en 1584, que representa los Cuatro Elementos, y está totalmente decorada de maravilloso mármol, piedras preciosas y conchas.
La colección de aquel momento se amplió siempre más y más, enriqueciendose continuamente con nuevas adquisiciones por parte de todos los miembros de la dinastía Medici, hasta su extinción en el siglo XVIII.
La Galería abrió al público más tarde, en 1769 por el Gran Duque Pedro Leopoldo, probablemente el más iluminado e importante miembro de la casa Austriaca de Lorena, nueva familia reinante del Gran Ducado hasta la unión de Italia.
La Galería fue reorganizada completamente de acuerdo a los nuevos criterios científicos de ese tiempo y las colecciones fueron divididas por tipo y destinadas a sedes específicas: para aquellas científicas fue creado el nuevo Museo de Física y Ciencias Naturales, conocido como el Observatorio (la Specola en italiano). Durante el siglo XIX muchas obras de esculturas del renacimiento, por las cuales el corredor de la Galería tomaba el nombre de la Galería de las Estatuas, fueron transferidas al Museo Nacional del Bargello y algunas piezas etruscas colocadas en el Museo Arqueológico. Desde entonces los Uffizi se ha convertido en uno de los museos más visitados y populares de todo el mundo.
Actualmente la atención está centrada en el proyecto de una nueva salida para la Galería, proyectada por el arquitecto Arata Isizaki. El ambicioso proyecto buscara conciliar el antiguo con el moderno.